Lo primero que se recomienda con respecto a los indicadores es que puedan hacerse visibles a diferentes empleados de la compañía, y no solo a los gerentes. Esto repercute en el conocimiento que todos los empleados tienen de cómo su actividad particular afecta el rendimiento total de la compañía.

También resulta decisivo que los indicadores sean guías para la acción, y no una fuente de confusión. Esto significa que deben contener información que inmediatamente invite y dirija a realizar acciones concretas. La claridad de los informes es por eso fundamental. Se recomienda buscar soluciones que utilicen el visual analytics. También una constante actualización de la información es esencial. Si los indicadores no se reportan a partir de una continua actualización de la información que sirve para su confección, cuando sean leídos por los usuarios, las decisiones tomadas a partir de ellos serán probablemente fallidas u obsoletas en el mejor de los casos.

Todo esto implica que es mejor siempre usar solo unos cuantos indicadores que realmente sirvan, y no una gran cantidad de información que se vuelve obsoleta por ser demasiado difícil de entender:

Demasiado a menudo encuentro que los líderes empresariales utilizan demasiados KPIs y acaban perdiendo el bosque por ver los árboles. En su lugar, elija tres o cuatro indicadores vitales que ofrezcan una visión general sencilla del progreso de su campaña. A continuación, haga un seguimiento mensual y trimestral en un gráfico de líneas básicas o en un diagrama de barras para ver cómo progresan las cosas a lo largo del tiempo. (forbes.com)

Otro consejo que dan expertos asesores es que los indicadores de ventas sean los mismos que se usan como indicadores para mercadeo. Como son procesos que están íntimamente ligados, si se usan indicadores diferentes, los resultados no van a mostrar cómo las estrategias publicitarias influyen en las ventas y cómo las ventas pueden influir en la publicidad. Raghunath Koduvayur, de IQM Quantum Computers, señala:

El marketing debe compartir los mismos KPI que las ventas. Este enfoque me ha ayudado a alinear los equipos y a inculcar un enfoque comercial conjunto en la empresa. Esto se convierte en nuestra estrella del norte. Los demás indicadores de rendimiento deben utilizarse como hitos o puntos de control en el camino hacia la consecución de estos KPI. Hay que ser coherentes en la medición; un proceso de “probar, reflexionar y repetir” nos ha ayudado a construir una cultura de alto rendimiento. (forbes.com)